Nutrición Hospitalaria - Simposio B. Braun - page 7

NUEVAS EVIDENCIAS CLÍNICAS EN EL USO DE LÍPIDOS CON
ω
-3 POR VIA PARENTERAL
• Separata. Nutr Hos. 2013; 28(5)
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Ponencias
No cabe duda que la nutrición parenteral y, en
concreto, la nutrición parenteral domiciliaria
(NPD) ha supuesto un avance extraordinario en
cuanto al manejo de niños con fracaso intestinal
permanente o muy prolongado y que constituye
una alternativa beneficiosa a las hospitalizaciones
prolongadas, pero se trata de una terapia que en
modo alguno es inócua, de manera que a medio o
largo plazo pueden producirse complicaciones, al-
gunas de ellas van a comprometer y a determinar el
pronóstico en estos niños, en concreto, la afecta-
ción hepática.
La enfermedad hepática, antiguamente asociada
a nutrición parenteral, que hoy prefiere denomi-
narse como enfermedad hepática asociada al fraca-
so intestinal, es una patología frecuente. Es una de
las mayores causas de mortalidad en el niño con
fracaso intestinal sometido a nutrición parenteral
prolongada. Dependiendo de la serie, del tipo de
paciente y de los criterios utilizados tiene una inci-
dencia de entre un 25% y un 85% de los niños so-
metidos a nutrición parenteral, siendo especial-
mente frecuente en recién nacidos que reciben este
tipo de nutrición, que constituye el 80% de los pa-
cientes de mi unidad y tiene una tasa de mortalidad
muy elevada. De tal manera, que niños con afecta-
ción hepática en el periodo de lactancia pueden al-
canzar la mortalidad el 90% al año del diagnóstico,
si no se puede suprimir antes la nutrición parente-
ral o ser portadores de un trasplante.
No se conocen bien todas las fisiopatologías ni
los mecanismo por los que se produce la alteración
hepática de los niños sometidos a nutrición parente-
Lípidos con
ω
-3 y
protección hepática
Experiencia de uso de Lipoplus
®
en pacientes pediátricos
sometidos a NPD
Gerardo Prieto
Jefe de Sección de la Unidad de Rehabilitación Intestinal
H. U. Materno-Infantil La Paz. Madrid
Gerardo Prieto
“La nutrición parenteral domiciliaria (NPD) ha supuesto un avance extraordinario en ni-
ños con fracaso intestinal permanente o muy prolongado y constituye una alternativa be-
neficiosa a las hospitalizaciones prolongadas”
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